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lunes, 29 de septiembre de 2014

Aquel dulce y amargo 23 de septembre...




@DSCblog
#DescubreSienteConoce 




El 23 de febrero de 1981 se produjo un hecho histórico muy importante en la historia de el país Español.


 
(La serie " Cuéntame como pasó" recrea la noche del 23f) 



Con la muerte en 1975 de Francisco Franco, habíamos dejado atrás la sombra de largos años de dictadura y el paraguas democrático comenzaba a cubrir nuestro país. Durante el inicio de los años ochenta los cabecillas : Antonio Tejero Molina, Jaime Miláns del Bosch y Alfonso Armada irrumpieron armados en el palacio de congresos con el fin de provocar un golpe de estado que devolviese a España a una dictadura militar. La valentía del  Manuel Guiterrez Mellado, ( único hombre que se resistió  a cumplir las ordenes del teniente militar Tejero ) se contraponía con la cobardía y el miedo de un país angustiado, confuso y asustado.

(Años después se nos ofrecen los secretos del Golpe de Estado públicamente)

Después de esta introducción para poneros en situación, declaro que este post va para todos aquellos que nunca vivimos aquel 23f o incluso para aquellos que lo vivieron y les gustaría comparar sus vivencias con las de los demás. A raíz de estas declaraciones decidí entrevistar a personas que pudiesen aportar un testimonio personal sobre el hecho, y así dejaros en esta pagina web declaraciones  reales  y subjetivas  que enfoquen lo ocurrido desde  puntos de vista personales, con el fin  de  no aburriros  con la historia “objetiva” que tan bien nos hemos estudiado durante nuestros años escolares:






“Aquel día de febrero, yo salí de casa y me fui con unos amigos a jugar una partida de cartas al bar “ El cuervo”,.
Terminada la partida, y ya con ganas de fiesta, nos fuimos a un pub que solíamos frecuentar. Y como casi siempre, irremediablemente nos liamos. Aclaro, que los pubs entonces, no tenían televisiones y que las nuevas tecnologías simplemente no existían.
Buena fiesta ese día. Cuando salí del pub para ir a casa, yo vivía con mi abuela y mis tíos, no había mucha gente en la calle, pero eso también era normal. Invierno , ya la una de la mañana.........
En casa estaban muy preocupados, porque no sabían donde estaba y si me había sucedido algo. Fue entonces cuando me entere de todo lo que estaba sucediendo.
Mis reacciones fueron simples. Mis estudios no iban bien y pensé rápidamente ( yo estaba en la edad de hacer el servicio militar), que de ningún modo me posicionaría en un conflicto como el que se presentaba. Decidí mentalmente  que la solución más radical era la que mas me convenía. Me marcharía de España. Tenia conocidos en Guatemala. Ese seria un buen destino para dejar atrás mis malos estudios y los miedos que nos corroían sobre una posible nueva dictadura.
Seguí por radio los acontecimientos y realmente , después de alguna que otra angustia, el desenlace fue rápido y bueno.
Ahora en frio, creo que era la única solución posible.
Hasta ahí los recuerdos que puedo ofreceros acerca de aquel estrepitoso día.  ¨

Adrián Rey Escapa, 53 años


“Cuando se inicia el intento de golpe de estado estaba en la biblioteca de la Universidad en San Sebastian preparando un trabajo de informática. Entro el Decano para mandarnos a casa. Nadie se marchó. Los pocos estudiantes que estábamos allí, nos reunimos para decidir. Ante la poca información y la incertidumbre no se hizo nada.
La desesperanza y un cierto temor nos invadió. Tantos años de exilio ( de mis padres) y tanto esfuerzo se iban al limbo. Fue una larga noche que terminó con una sensación muy amarga y con la seguridad de que el golpe no iba adelante, pero que la nueva democracia iba a estar permanentemente vigilada y constreñida. Sensación que mantengo aunque hayan pasado tantos años ¨

Anónimo, 58 años

“Yo tenía catorce años y estaba estudiando en casa de una amiga. Me llamó mi padre y me dijo que fuese inmediatamente a casa, y noté que el estaba asustado por algo y preocupado. Nos reunió a todos en casa, llamó a todos, para que estuviéramos juntos en casa. Él trabajaba en la radio  y bueno.. yo viví eso como algo que era importante pero no fui lo suficientemente consciente.
En mi casa había un señor que estaba empapelando el salón y mi hermana fue a avisarle y le dijo:

-Han atracado el congreso.
Entonces el se asustó y dijo:
-¿El bar del congreso?
-No, no, las cortes.
-¿El que esta al lado? ¿Las cortes?
-No.. lo de Madrid, de los ministros.
-Ah, bueno..

Y siempre lo contamos como anécdota, por que fue ignorancia absoluta.”

Beatriz Dapena, 50 años.


Publicado por Cristina Somavilla Rey




Y ya sabeís, #DescubreSienteConoce.


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